La sanidad andaluza se hunde

Los últimos datos hechos públicos por Ministerio de Sanidad certifican que los andaluces son los españoles que más esperan para una intervención quirúrgica, 164 días de media, y para consultas con especialistas, 130 días de media, un aumento de 77 días más que el año pasado.

Hospital Regional Universitario de Málaga.

Unos datos que dibujan muy bien cuál es la radiografía de la sanidad pública en Andalucía, que hace algo más de un año era el principal caballo de batalla del Partido Popular, hoy en el Gobierno, contra el PSOE, que consideraba a su sistema sanitario como “la joya de la Corona”.

La Consejería de Salud y Familias, dirigida por el polémico, Jesús Aguirre, que saltó a la primera plana de la actualidad por su criticada gestión de la infección causada por la listeriosis lanza ahora incienso sobre su actuación asegurando que se ha producido una reducción de cerca de 3.000 pacientes en la lista de espera para las intervenciones quirúrgicas, o que la plantilla del Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha crecido en más de 4.500 profesionales desde 2018, de los que 2.400 son médicos.

Aunque lo cierto es que basta con asomarse a cualquier medio informativo para comprobar el lamentable estado al que están conduciendo la sanidad de todos los andaluces. Los sindicatos han denunciado en el último mes el cierre generalizado durante todas las Navidades de numerosos Centros de Salud por las tardes. Los gestores del SAS alegan que “no se encuentran profesionales médicos disponibles en el mercado laboral para que puedan realizar sustituciones en este periodo”.

La oposición socialista denuncia que la ausencia de profesionales está colapsando los servicios de urgencias de los grandes hospitales, como sucedió la pasada semana en el Hospital Regional de Málaga o en el Hospital Clínico de la misma provincia.

Mientras tanto, la situación se va calentando y se generalizan las protestas públicas de profesionales y ciudadanos, que ya fueron noticia permanente durante el gobierno de Susana Díaz. Protestas relevantes son las producidas en el Hospital San Juan de Dios de la que depende una extensa población de la comarca del Aljarafe sevillano y donde se han tenido que suspender decenas de intervenciones quirúrgicas.

Otro ejemplo lo encontramos en  la Asociación de Padres y Madres de Niños Oncológicos de Málaga (Aspanoma) que se manifiestan por la suspensión de citas y consultas de oncología pediátrica por falta de personal; o en el Campo de Gibraltar en donde protestan por la pérdida de servicios. Después de muchas reclamaciones, solo la movilización popular consiguió que un Centro de Salud de Sevilla volviera a tener pediatras tras la eliminación de los facultativos.

De momento, Andalucía sigue a la cola en inversión sanitaria en España con 1.153 euros por habitante y año, a una enorme distancia, por ejemplo, del País Vasco, que destina 1.710 euros, según datos del Ministerio de Sanidad.